El Ingenio llamó a Sugerencia para que esta a la vez llamara a Locura y pudieran aprovechar el sol radiante de ese día. Sugerencia, propuso invitar a Sentido Común, pero éste declinó la invitación porque sabía que a Locura le iba bien todo el mundo y avisaría a Amistad y a todos sus secuaces cosa que le haría hacer pensar todo el día; prefería dejar la reflexión para los días de trabajo ya que sabía con su buen sentido que los domingos no estaban hechos para trabajar...
Pero el Engaño oyó la diatriba y logró infiltrar con disimulo el rumor entre el lugar. Un cúmulo de emociones y discursos se reunieron en el sitio acordado y así pasaron de una relajante excursión a una suculenta manifestación de discordantes soluciones...