martes, 8 de febrero de 2011

La verdad reside en lo no dicho

"Silencio calculado sin pensar, en el momento en que los cuerpos alargaban el deseo, sólo roto por palabras que alentaban la propia excitación.
Abrasados no daban descanso, leyendóse poro a poro, evitando que aquel momento tuviese final."

Brotaba la realidad creada que es la única que existe, aquella que se construye en el momento y no en el que podrá ser. Se vestía la verdad  en cada caricia, rodeándola con suspiros de lo que podría haber precedido, besando la piel, desfalleciendo y volviendo a brotar para no encontrar un fin para decir que todo continua.
 Esa es la única verdad, esa es la única realidad. 

Las palabras que alumbran a la luz de espectadores lucen cargadas de interferencias, de valores caducos y preestablecidos, desdicen el erotismo que grita por querer. Queda bien ser liberal y libre, es moda querer lo "inquerible", queda bien luchar por sueños poetas y renunciar así a lo que podría ser.Queda bien querer aquello que cuando queramos querer ya no será lo que queríamos en nuestro fuero tener. Bien está demostrar que nada nos importa  y todo es frío y caduco.
Iuska