miércoles, 28 de diciembre de 2011

Vuelta y Re-vuelta

He pensado y escrito sobre espirales y capas que cubren el corazón. No me desdigo de lo dicho pero voy transformando las palabras según la situación. Querer vivir la vida en espiral me significa optimizar y transformar lo negativo en positivo. Creer que nada se estanca, aunque se asemejen las situaciones que el aprendizaje ha sido asimilado. Crear capas en el corazón era vivir con desparpajo y ser "observante" del mundo sin caer en su desidia.No renegar del pasado era entrar en su comprensión y empatizar, visto todo en la lejanía, con quien había contribuido en mi vida.
Cuando escribo, realizo una catarsis y "reseteo", presente y futuro. No descubro la sopa de ajo, es lo que hace todo el mundo cuando estampa las palabras venidas desde el interior.
Ahora se produce una nueva situación, nuevos hechos que no debería describir sin perspectiva, aunque si no lo hago... caigo? y eso me enseñaron Doña Espiral y Cubre Corazones a no sucumbir.
Él murió, SÍ, la palabra y el hecho es así de simple, murió, su cuerpo desapareció aunque como pasa con todo ser querido ha seguido pululando en los recuerdos. Su presencia se hacía firme en situaciones que no le hubiesen agradado y como por encanto aquello se torcía de manera irremediable. El día que se incrustaba en el alma, sabías que todo había llegado a su fin y nada era de su agrado. Para mi consuelo yo le llamaba protección y algo mejor debía venir, mejor no luchar contra viento y marea.
"Descapando" capas y cerrando círculos ha vuelto a aparecer, nada etéreo, real como la vida misma. Con su mismo nombre, con dolor humano, real.
No me puedo creer, porque no soy creyente, que algo superior tenga tanta mala leche de presentarme la misma situación por duplicado y no me muestre una solución. Qué tanto por ciento de probabilidades existen que una persona pase por la misma desgracia miles de veces aunque se esfuerce en dinamizar, amar, mejorar Estoy cabreada, ya no quiero tener un equilibrio emocional, ni social, ni empático ni nada de nada. Estoy muy cabreada, enfadada, jodida con todo, con el mundo, con los sentidos, con las buenas maneras, con lo correcto, con lo que debe o debería ser. No me sé explicar mejor; pero como dijo nuestro querido Fernando Fernán Gómez: A LA MIERDA!!!!!!
Iuska-28 Desembre 2011