martes, 10 de noviembre de 2015

Marginadas por parir

Que alguien me quiera convencer que no es necesaria una política en contra de la desigualdad. Me da igual que sea el tipo de humillación y violencia hacia la mujer, me da igual sea en el lugar del mundo que sea. Hace catorce o quince años (para el área de sociología, en la carrera) hice un alegato contínuo, diario, del día a día sobre los derechos de las mujeres, sobre el derecho como personas. Este discurso, le pese a quien le pese y lo quiera entender como lo quiera entender cada cual, no va en contra de los hombres, ni de las mujeres, va a favor de la persona, de la dignidad, del disfrute que le toca a cada cual, simplemente por el derecho de existir. El discurso no lo ejercía ni lo ejerzo en contra de nadie en particular, lo hacía y lo hago en contra de la permisividad del sistema igual que lo hago por los trabajadores y trabajadoras, desde mi corazón, con mi expresión, puede que ilusa, de como debería ser el mundo. Con los años me he ido enterando a través de conversaciones inconexas que esta "diatriba, discurso, exposición de la realidad", le molestaba a muchos porque se sentían atacados (aquí no voy a utilizar el femenino, salvo para las que se sientan defensoras de algo indefendible)
Con los años me fui callando para no molestar, en años posteriores ignoro si a alguien le molesta la realidad. Puede que no comente en voz alta, puede que entre en el "chascarrillo", sin seguirlo hasta sus últimas consecuencias... pero sé pensar y pienso, si lo personalizáis en "vosotros" si no sois suficientemente inteligentes para ver lo que está ocurriendo, amigos míos... realmente no vale la pena gastar saliva.
Sigue pasando, en el día a día y no son números, son personas, pasando frío, hambre, humillación, malos tratos, cada segundo, cada minuto, cada hora del día. Anda, probadlo "vosotros y las defensoras sólo durante un día. No personalicéis, abrid la mente y vivid una visión globalizada.
" Dodakka y él no pueden vivir en la casa familiar durante los próximos dos meses, deben permanecer fuera, en las calles de arena de su pueblo, Gollarahatti, una aldea más del Estado de Andhra Pradesh, en el sur de India. Dodakka es impura a ojos de su familia, de su comunidad y de sus dioses porque ha dado a luz."


En India, las mujeres kadugolla son víctimas de las creencias de su casta. Las madres recientes y las que tienen la regla son tachadas de impuras y aisladas en chozas de paja en el campo. Por LOLA HIERRO
ELPAIS.COM|DE LOLA HIERRO

martes, 3 de noviembre de 2015

Tu recuerdo no olvidado...

Hoy, es un día, en que has estado presente en mi memoria sin buscarte, sin atraer pensamientos claros sobre ti...
Era un rito, pasar cada año habiendo cumplido con el ritual de duelo, de visitarte en tu tumba, de hablarte, de llorarte, de desahogar mis penas... Hace poco, quizás dos aniversarios, rompí el rito. Eso no me impidió romper el vínculo contigo y me sorprendió... No necesitaba estar a tus pies para tenerte... Ha pasado la noche de los santos, de los muertos y yo los he utilizado en otros menesteres, los cuales no incluían ir presencialmente a verte, entre otros porque celebro la vida, la vida de un ser que nació cerca de estas fechas y no quiero estigmatizar con la muerte, aunque yo acepte que vida-muerte, es un todo. Pero "vés per on" pasados los días y por aquellas casualidades que vienen por una causa me aparece " la canción, tu canción" aquella que decidiste y decidimos que pertenecería a tu lápida para que nunca olvidásemos porqué te fuiste, porqué no nos acompañaste hasta el final natural..

Te dejo pues el homenaje que te mereces, te dejo aquí y ahora, tu canción, nuestra canción, para que no olvidemos, para seguir llevándote a nuestro lado...
No te olvidamos Meli, no te olvidamos José Luis...

Iuska November 2015